Hace muchos tiempo que no me cambiaría por nadie,
porque me gusta lo que soy, y quién soy... siempre disfrutando el lugar,
las personas, y situación en la que me encuentre... este dónde esté
y con quién este... y eso es un maravilloso regalo!!!!
M. Patricia Garza A.
Hoy nuevamente despidiéndome de Italia con
buenos cafés, gente vestida increíble, jóvenes de todas las edades y por
supuesto hermosas mujeres de mi interesante edad, no veo a nadie vestido de Chándal
(pants deportivos como le decimos en América).
Ciudad con terrazas y lugares
maravillosos para los aperitivos (pides una bebida y cenas gratis), la
historia y el arte abrazándome a cada
paso, pero sobretodo la compañía brillante y divertida de mi querida viajera
incansable, mi hija...
Visitar Italia a su lado es una aventura
siempre, lleno de movimiento y de conocimiento pues a donde me lleva aprendo de
todo, que al final eso es lo que nos dejan los viajes solo riquezas, lugares
bellos llenos de historia, charlas entre ricas comidas, y paseos a el interior,
donde como cómplices hablamos de lo que pasa por nuestros corazones, consejos
de ida y vuelta, si no se sorprendan, ella me aconseja de publicidad y yo un
poco de la vida que le gano en experiencia.... y sobretodo en años.
Siempre regreso con ese sentimiento de
“hasta pronto”, mi corazón dejando un pedacito aquí colgado en el perchero para cuando vuelva, una charla inconclusa que
terminará a mi regreso y tareas por completar ... de todo tipo.
Como siempre llego con tiempo suficiente
para mirar el ir y venir de los viajeros solos o en compañía...... hilar
historias, imaginar finales felices y ver la diversidad cultural, diferentes
comportamientos, prisas, encuentros, sonrisas, lágrimas....
Un aeropuerto es algo vivo, donde se
palpan toda clases de emociones, no puedo sustraerme a la necesidad de
plasmarlo y compartirlo con ustedes.
Disfruto mucho viajar, el poder conocer
tantos lugares, costumbres, culturas, comidas, comportamientos.... idioma, pero
sobretodo el gran idioma mundial... la sonrisa, todos reaccionan de una manera
positiva a este hermoso recurso de una sonrisa, inmediatamente encuentro
aliados, cómplices y personas que de repente les da por practicar el español,
me pregunto reflexionando si me he quedado sin hacer algo porque no sé el
idioma? Y mi respuesta es no... siempre me puedo comunicar, a señas, con
sonrisas, con gestos, con las manos...
He corrido aventuras que el resultado
siempre son carcajadas, porque cuando viajo con el corazón y la mente abierta,
cualquier eventualidad es digna de ser contada en historia: me tocó ver en un
hermoso restaurante a las mujeres de mi edad y muy hermosas, bien vestidas,
maravillosas!! Disfrutando de su estar solas, comiendo tomando un aperitivo, sonriéndole
al mundo desde su situación cualquiera que sea, ellas creo han entendido lo que
decía John Lennon somos enteros, pero nos han enseñado a creernos incompletos y buscar afanosamente nuestra mitad.... Ellas ahí enteras, hermosas,
auténticas.... sin pedirle a las hermosas jóvenes nada, con la envidiable
actitud de disfrutar cada instante solas o acompañadas... y yo ahí siendo parte
de ese grupo, por motivos diferentes, sin problema alguna, entre sonrisas de
entendimiento, disfrutando cada una nuestros pensamientos, y esa silenciosa
hermandad...
Y así seguirán habiendo historias y
aventuras para contar, para recordar y me viene a la mente una frase que leí no
recuerdo donde...
“Un viaje se hace tres veces; cuando lo planeas,
cuando lo realizas....y cuando lo recuerdas”
Soy muy afortunada por optar a aventurarme a decidir recordar en lugar de imaginar... Llevo ahora mismo en mi maleta; experiencias espectaculares,
paisajes de ensueño, historias magníficas, crecimiento espiritual y personal,
abrazos y cariño de las personas amadas de este lado del océano, vivencias y
la voluntad inquebrantable de trabajar mucho por el viaje que sigue sea a donde
mis sueños me lleven, sola o acompañada... creo que es el mayor tesoro que
puedo adquirir...
Hoy con uno de los mejores cafés del
mundo, me despido antes de tomar el vuelo que me acercará nuevamente a la mitad
de mi familia, a mi hogar porque un trozo se
queda aquí, en el corazón de mi pequeña princesa que ha decidido ser
Dragón y volar a tierras lejanas... te dejo un abrazo lleno de bendiciones; que
los ángeles te protejan mientras nos volvemos a encontrar, me llevo tu sonrisa
tatuada en mi memoria, agradeciendo infinitamente tener no “suerte” sino
infinidad de bendiciones.
Chao...Arrivederchi... hasta que nos volvamos
a ver... Buen día, buena vida!!!
M Patricia Garza Alejo
Terpeuta/Coach
www.unplanb.com.mx